martes, 17 de marzo de 2009

LA HISTORIA DE UNA HISTORIETA FINAL... por ahora.

Desde su aparición en abril de 2005, en el períodico del Club Estudiantil Porteño, El Chispa no ha parado de darnos satisfacciones. Primero por el desarrollo creativo de los personajes, después por las relaciones personales surgidas en el medio y por último por su repercusión. Pasó por varias publicaciones de distribución gratuita (La Voz de Castelar -donde aún se luce-, Rivadiario y Desde el Aula, entre otras) hasta recalar en la mejor etapa del suplemento Croniquita del diario Crónica (cuando estaban al frente profesionales que sabían de chicos y de periodismo como Blanca López y Martin Arcuri). Cada etapa fue un sentimiento especial de emoción. Entregar los originales y esperar ansiosos ver esas ideas convertidas en algo concreto en papel. En algo que quedaría a juicio de miles de personas. Que podía agradar, disgustar o pasar desaparcibido. Lo mismo nos sucedió con la edición del libro por parte de Deux. Al principio había fracasado el intento por sumarnos a la colección Aventuras Dibujadas (de la que somos fans) porque ya estaban elegidos todos los títulos. Al ser convocados por esta editorial para una propuesta similar (donde figuraban nombres como el de nuestro admirado Rovella) no dudamos en decir que si. Nuevamente se sucedieron las emociones y la angustía. El libro era esperado para fines del año pasado pero no salía. ¿Seríamos otra victima de la crisis global?. Finalmente , el editor Pablo Muñoz me confirmó la noticia por teléfono. Y les digo la verdad hasta que no ví el libro en el kiosco de mi barrio me negue a creerlo.



- Ahora se van a hacer famosos, repiten una y otra vez todos los que nos conocen.

Yo les explico que no. ¿Cuántos creadores de historietas de nuestro país son conocidos por el gran público?. Repasemos:Quino, Caloi, Maitena, Fontanarrosa, Nik, Sendra.En su mayoría son humoristas con décadas de trabajo sobre sus espaldas en períodicos como Clarín o La Nación que no dudaron en publicitar con campañas televisivas sus trabajos. Gente ultra admirada por nosotros como Trillo, Meglia, Robin Wood, Daniel Paz o Oesterheld no son conocidos por Doña Rosa. Aunque sean más interesantes y valiosos que Susana. Tampoco creo que la publicación de un libro sirva para hacer conocido a un personaje. Hoy chicos y grandes son bombardeados por productos televisivos y cinematograficos a punto tal que uno borra el recuerdo del otro. En un día Cartoon Network emite más series animadas que todas las que podía ver un niño en la televisión de la década del `70. ¿Es mejor el Oso Yogui que Dos Perros Tontos?. Seguramente no. ¿Entonces porque uno se mantiene vivo en la memoria colectiva y el otro solo es recordado por memoriosos?. La respuesta es sencilla, personajes como Yogui estuvieron mucho tiempo solos peleando por el interés de los espectadores, los otros fueron rápidamente reemplazados por nuevos productos que a su vez fue rápidamente reemplazados. ¿Cuántas películas geniales duran solo unos días en el cine? Alguna de ellas podría convertirse en un clásico moderno, como hoy lo son Terminator o Volver al Futuro, de no ser por esta misma invasión de ficciones que hacen imposible dividir lo malo de lo memorable. Estos comentarios no son para que nos deprimamos. Solo sirven para conocer el terreno que pisamos y no esperar lo imposible. Todo lo que hicimos fue muy bueno, porque de la nada creamos un personaje (o un universo de personajes) y logramos sumar voluntades para tener nuestro propio libro que pelea en los estantes de kioscos y comiquerias por llamar la atencion entre tanto Batman y Ben 10. Es el primer paso, faltan muchos más. Nosotros seguiremos dando pelea. Como lo hacen todos aquellos héroes que admiramos. Reales y de ficción.

No hay comentarios: